Nada
era cierto. Todo había sido un mal sueño. Muy malo.
¡Pero,
pero muy malo!
Ahora
os contaré la historia:
Estaba
en mi casa, y vi que estaban volando cosas en el exterior. Y yo
alucinada y asustada, salí a la puerta. Vi a mi familia volando y no
se como volé sin el viento y les salvé; y vi a mis amigos también
volando.
Al
girarme vi a la persona que provoco eso. Intenté luchar con ella, le
lancé una bola de viento, que tampoco sabía lo que era.
Se
acercó una ráfaga muy fuerte de viento mientras vi las cosas
volando y mi aldea destruida.
El
me lanzó una bola de viento y me quedé inconsciente.
Cuando
desperté no había nada ni nadie...
¡FUE
TERRIBLE!
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